La Bolsa de Wall Street ha cerrado este martes con fuertes caídas su peor día del año y su principal indicador, el Dow Jones de Industriales, bajó casi un 4%, tras conocerse que la tasa interanual de la inflación en agosto en Estados Unidos ha bajado menos de lo esperado, lo que apunta a una continuidad de la política agresiva de la Reserva Federal (Fed) estadounidense.

Al cierre de las operaciones en la Bolsa de Nueva York en el que fue el peor día de 2022 para los tres índices principales, el Dow Jones perdía un 3,94% o 1.276,37 puntos, hasta 31.104,97, mientras que el selectivo S&P 500 bajaba un 4,32% o 177,72 unidades, hasta 3.932,69.

Por su parte, el índice compuesto del mercado Nasdaq ha sido el que más ha bajado, un 5,16% o 632,84 enteros, hasta 11.633,57, ya que las tecnológicas recibieron el mayor golpe porque sus acciones son más sensibles a subidas en las tasas de interés.

La inflación de Estados Unidos volvió a bajar en agosto, por segundo mes consecutivo, y situó su tasa interanual en el 8,3%, dos décimas menos que en julio, según los datos publicados este martes por la Oficina de Estadísticas Laborales (BLS).

Sin embargo, con respecto al mes anterior, los precios de consumo subieron una décima, después de haberse mantenido estables en julio, pese a la bajada del 10,6% de los precios de la gasolina.

“Cifras más elevadas de lo esperado”

“El informe sobre Índice de Precios al Consumo (IPC) fue inequívocamente negativo para los mercados de valores. Un informe (con cifras) más elevadas de lo esperado significa que recibiremos una presión continua de la política de la Fed a través de aumentos de tasas”, ha asegurado el director de investigación de la firma Janus Henderson Investors, Matt Peron, citado por el canal ‘CNBC’.

El presidente de la Reserva Federal estadounidense (Fed), Jerome Powell, ha insistido en numerosas ocasiones en su compromiso de seguir subiendo los tipos de interés, que actualmente se encuentran entre el 2,25% y el 2,5%, tanto tiempo como sea necesario para reducir la inflación.

El crudo de Texas cerró en 87,31 dólares el barril

Los inversores están también a la espera de que el jueves se conozcan los informes sobre las ventas minoristas y la producción industrial que completarán la instantánea de la situación económica antes de la próxima reunión de la Fed.

“Esta idea de que vamos a llegar a un aterrizaje suave (de la inflación) se vuelve cada vez menos probable”, ha dicho Matt Forester, director de inversiones de Lockwood Advisors en BNY Mellon Pershing, en declaraciones recogidas por ‘The Wall Street Journal’.

Por sectores, este martes todos cerraron en rojo, con las mayores pérdidas eran para el de comunicaciones (-5,63%), tecnología (-5,35% ) y bienes no esenciales (-5,22%).

Parecida fue la tónica entre los 30 valores del Dow Jones, liderando las bajadas de Boeing (-7,19%), Intel (-7,19%) y Home Depot (-6,59%).

En el mercado del petróleo, el crudo de Texas cerró en 87,31 dólares el barril y al cierre de Wall Street la rentabilidad del bono del Tesoro estadounidense a diez años subía al 3,427%, el oro bajaba a 1.713 dólares la onza y el dólar subía frente al euro, con un cambio de 0,9972.