La Secretaría de Economía informó que México recibió la solicitud para el inicio de consultas por parte de Estados Unidos con relación a la política energética del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, de conformidad con lo establecido en el Artículo 31.4 del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).

“El Gobierno de México externó su voluntad para alcanzar una solución mutuamente satisfactoria durante la etapa de consultas”, aseguró la secretaría que encabeza de Tatiana Clouthier.

Las consultas constituyen la etapa no contenciosa del mecanismo general de solución de controversias que prevé el T-MEC, recordó la dependencia federal.

A partir de esta fecha, ambos países tienen un periodo de 75 días para solucionar la controversia durante esta etapa. En caso de no llegar a un acuerdo mutuamente satisfactorio sobre la correcta aplicación e interpretación de estas disposiciones, Estados Unidos podrá solicitar el establecimiento de un panel para que decida sobre este asunto.

Desde la entrada en vigor del T-MEC -1 de julio de 2020-, esta es la cuarta vez que se utiliza el mecanismo general de solución de diferencia. Estados Unidos inició un procedimiento en contra de Canadá por la distribución de cupos en el sector lácteo; Canadá en contra de Estados Unidos por una medida de salvaguarda en materia de células fotovoltaicas; y México y Canadá en contra de Estados Unidos por la interpretación y aplicación de las reglas de origen en el sector automotriz.

La Secretaría de Economía es la dependencia de la Administración Pública Federal encargada de coordinar la defensa del Estado mexicano.

Estados Unidos avanzó este miércoles en su disputa con México por la política energética del presidente López Obrador al presentar una queja formal bajo el Tratado comercial de Norteamérica por considerar que perjudica a sus empresas.

El gobierno de Washington solicitó consultas para resolver disputas; un primer paso en un proceso que podría conducir a represalias, al estimar que México beneficia a la CFE y a Pemex en detrimento de las empresas estadounidenses e impide el desarrollo de la energía limpia, según la oficina de la representante comercial estadounidense.