El primero de dos vuelos previstos para la repatriación de mexicanos ya se encuentra en Israel. Así lo confirman páginas de tráfico aeronáutico y fuentes del Gobierno de México. Después de realizar escalas en Canadá, Irlanda y Turquía, el Boeing 737 de la Fuerza Aérea Mexicana aterrizó este martes pasadas las seis de la tarde y ya espera en el aeropuerto internacional Ben Gurión de Tel Aviv para el desalojo del primer grupo de connacionales varados por el conflicto entre las tropas israelíes y el grupo islamista Hamás, que gobierna Gaza.

La Secretaría de Relaciones Exteriores señaló en un comunicado que se dará apoyo prioritario a personas que se encuentren en situación de vulnerabilidad por el conflicto armado: niños, niñas y adolescentes; personas accidentadas, lesionadas o enfermas; mujeres embarazadas; personas indígenas, y trabajadores agrícolas temporales. También se utilizará como criterio la cercanía con la zona de conflicto. Más de 500 ciudadanos mexicanos enviaron solicitudes de apoyo a la Cancillería, aunque se habla de 300 que han pedido la repatriación, de acuerdo con los comunicados publicados esta semana. Los pasajeros, la mayoría turistas, debieron completar un formulario de registro.

El segundo avión dispuesto por el Gobierno mexicano espera en Antalya, en la costa suroeste de Turquía. En ambos vuelos el recorrido fue el mismo. Salieron del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles rumbo a Gander, en la Isla de Terranova, en Canadá. Después se enfilaron a Shannon en Irlanda e hicieron una última parada en territorio turco antes de acercarse a Israel. Es una ruta similar a la que tomaron los vuelos humanitarios de México para la repatriación de mexicanos tras la invasión rusa de Ucrania el año pasado. En esa ocasión, alrededor de 150 pasajeros fueron evacuados en cada vuelo, aunque las autoridades aún no han confirmado cuántos abordarán esta vez.

“Seamos claros. México aboga por la paz, el diálogo y la protección de civiles sin matices”, afirmó Alicia Bárcena, secretaria de Relaciones Exteriores, este martes. Sus declaraciones se han producido después de que Israel expresara su “inconformidad” ante los comentarios que hizo el lunes el presidente Andrés Manuel López Obrador y exigiera una condena más contundente contra el terrorismo.

“Como la historia nos ha enseñado repetidamente, mantener una posición neutral en lugar de tomar partido implica, en última instancia, respaldar y apoyar al terrorismo”, recriminó la representación diplomática. El reproche de la Embajada israelí aduce que no ha sido lo suficientemente tajante para denunciar a Hamás. “Instamos a terminar con ataques indiscriminados y la violencia contra civiles por parte de Hamas y por parte del ejército de Israel en Gaza”, agregó Barcena.

López Obrador respondió en su conferencia matutina que Israel “está en su derecho” de inconformarse, pero rechazó cambiar la posición que estableció su Gobierno, que está ceñida por los principios de política exterior que México ha defendido tradicionalmente. “Nosotros respetamos al Gobierno de Israel, y muchísimo más al pueblo de Israel, pero nosotros no queremos la guerra, nosotros no queremos la violencia, nosotros somos pacifistas y no queremos que pierdan la vida ningún ser humano de ninguna nacionalidad”, dijo el presidente.

El mandatario dijo que no iba a entrar en polémicas porque la Constitución de México, que enarbola los principios de no intervención y de la solución pacífica de las controversias, no le permite tomar partido en el conflicto. El intercambio de comunicaciones diplomáticas es el último eslabón de una ríspida cadena con Israel, en particular por la solicitud de extradición del exdiplomático Andrés Roemer y Tomás Zerón, acusado de tortura en las investigaciones sobre la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa en 2014. La Embajada israelí dijo que la extradición de Roemer, detenido la semana pasada por acusaciones de violación, no iba a entorpecerse, pese al conflicto armado.

México tiene poco más de 5.000 ciudadanos en Israel y en los territorios palestinos. Tras el estallido del conflicto bélico el pasado 7 de octubre, las autoridades dieron a conocer que dos mexicanos habían sido tomados como rehenes por Hamás. Se trata de Ilana Gritzewsky, radicada en ese país desde hace años, y Orión Hernández, que acudió a un concierto en Palestina con su novia. La Cancillería ha señalado que se mantiene en comunicación permanente con sus familias. David Heiblum, otro connacional que se encontraba desaparecido, está salvo junto a su esposa, una ciudadana panameña.

México no es el único país latinoamericano en vilo. Argentina, donde reside la mayor comunidad judía de la región, lamentó la muerte de cuatro ciudadanos e informó de la desaparición de otros cuatro. Brasil anunció que iba a mandar al menos 15 vuelos para repatriar a quienes quedaron varados y la búsqueda de desaparecidos se extiende por todo el continente. “Posterior a la preparación para el retorno, las y los mexicanos que se encuentran en territorio israelí o en Palestina podrán regresar a casa en este primer avión. El segundo vuelo va en camino para continuar con el plan de repatriación”, señaló la Cancillería mexicana.