Por segunda ocasión consecutiva, la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos incrementó su tasa de interés en 75 puntos base, para ubicarla en un rango entre 2.25 a 2.50%, esto con el objetivo de combatir la alta inflación que en junio se ubicó en 9.1% anual, advirtió que continuará con los aumentos.

El objetivo puntual de inflación de la Fed es que e ubiquen en 2 por ciento.

A través de un comunicado, el Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) señaló que los indicadores recientes de gasto y producción se han suavizado, sin embargo, la creación de puestos de trabajo ha sido sólida en los últimos meses y la tasa de desempleo se ha mantenido baja.

En junio, las nóminas no agrícolas aumentaron en 372,000 puestos de trabajo, de acuerdo con el Departamento de Trabajo, y la tasa de desempleo se ubicó en 3.6%, niveles previos a la pandemia.

La Fed aseguró que la inflación continúa elevada y refleja los desequilibrios de la oferta y demanda relacionados con la pandemia por Covid-19, el aumento de los precios de los alimentos y la energía, así como presiones mayores en los precios en general.

Asimismo, la Reserva se refirió a la guerra en Ucrania, la cual está causando “tremendas” dificultades humanas y económicas. “La guerra y los eventos relacionados a ésta crean una presión alcista adicional sobre la inflación y pesan sobre la actividad económica mundial, por lo que el Comité estará muy atento a los riesgos de inflación”, señaló.

El martes, el Fondo Monetario Internacional (FMI) recortó su previsión de crecimiento económico mundial para este año, de 3.6% en abril a 3.2% mientras que para el 2023 bajó de 3.6 a 2.9%, alegando los mismos factores señalados por la Fed y advirtió que el mundo está al borde de una recesión.

Entre otras medidas que implementará el banco central estadounidense destacan la reducción de sus tenencias de valores del Tesoro y deuda de agencias y valores respaldados por hipotecas de agencias, tal y como se describe en los planes para reducir el tamaño del balance de la Fed emitidos en mayo.