San Patricio es llamado misionero cristiano y Apóstol de Irlanda. Los santos patronos son elegidos para proteger los intereses de un país, lugar, grupo, oficio, profesión o actividad, y para interceder por ellos en el cielo. San Patricio es responsable de convertir al pueblo de Irlanda al cristianismo.

La leyenda dice que San Patricio usó el trébol para explicar el concepto de la Santísima Trinidad, mostrando a un incrédulo la planta de tres hojas con un tallo. Los tréboles son la flor y emblema nacional de Irlanda.

La historia de Patricio mezcla leyenda y realidad, se pierde en la bruma de los tiempos. Uno de los biógrafos más acreditados sobre este tema, el académico irlandés T.F. O’Rahilly, propuso la “teoría de los dos Patricios” en la que sugiere que muchas de las tradiciones más tarde vinculadas a San Patricio en realidad se referían a un tal Paladio que fue enviado por el papa Celestino I como primer obispo de los cristianos irlandeses en 430 y trabajo en esa región hasta el 441, fecha en la cual murió sin poder completar su trabajo de evangelización. Este sería uno de los “Patricios”. El segundo sería un tal Padraig el galaico, que en latín sería traducido como Patricius. De este último se tiene más noticias y con el paso de los siglos se fusionaron las dos biografías en una. Pero se sabe que ambos existieron y no son un mito.