En febrero del próximo año podría alcanzar el kilogramo de tortilla en Tuxtla Gutiérrez los 25 pesos, debido a los altos costos de producción, además, los industriales de la masa y la tortilla se enfrentan a una competencia desleal de la que la Procuraduría Federal de Protección al Consumidor (Profeco) no ha tenido voluntad, ni capacidad para generar orden en la producción y comercialización.

El presidente de la Industria de la Masa y la Tortilla Somos Chiapas, José Ramón Salazar Ballinas , sostuvo que las autoridades no quieren generar orden, más del 90 por ciento de las seis mil tortillerías son informales, no pagan impuesto, no pagan seguridad social a sus trabajadores, tampoco Infonavit, muchas papelerías, rosticerías, panaderías, dulcerías, tiendas de abarrotes, vulcanizadoras y de ropa se han incorporado a la venta de tortillas, además, no se sabe el origen de mucha tortilla.

“Ya nos cansamos de denunciar, las autoridades solo sirven cuando quieren ‘fregar’ al negocio formal, si bien está liberado el precio de la tortilla, no se vale que muchos negocios vendan 800 gramos en vez de un kilogramo , Profeco los tolera, se hacen ‘tontos’, no se despachan mil gramos en muchas tiendas, la Dirección de Desarrollo Urbano del ayuntamiento de Tuxtla Gutiérrez no tiene un censo de las tortillerías informales quienes entregan la licencia de funcionamiento”.

En la capital del estado suman ya 10 años que no se entregan licencia de funcionamiento de tortillerías, la exigencia es que todas las tortillerías estén regularizadas y cuenten con licencia de funcionamiento para que cumplan con las normas de protección civil y de salud, solo 600 tortillerías cumplen con la ley y que están en riesgo de quiebra por la alta competencia, “hay unas grandes mafias vendiendo en el ambulantaje”, sostuvo Salazar Ballinas.

Me he acercado al titular del Instituto Mexicano del Seguro Social en busca de soluciones y la regularización de la industria por la que lamentablemente está ingresando gas huachicol de Veracruz y Tabasco que no factura, el mexicano es “tramposo por naturaleza”, se ocupa de no pagar impuestos, al haber mucha informalidad a la que se han incorporado indígenas en el lado oriente sur y norte, venden muy barato y las empresas legales tienen pocos ingresos, hay una guerra de precios, no precios justos, señaló.

Se prevé que para el mes de febrero llegue a 25 pesos el kilogramo de tortilla, aun debajo de otros estados como Tabasco que vende a 25 pesos, Campeche a 26 pesos y Yucatán a 26 pesos, se prevé un 2023 económicamente muy complejo, el incremento al salario anunciado para entrar el vigor el 1 de enero próximo está generando una fuerte presión inflacionaria y un declive económico muy grave, insistió el dirigente.

Salazar Ballinas comentó que el precio no es estandarizado en el estado en Tuxtla Gutiérrez hay desde los 11 pesos a los 22 pesos y en algunos casos a 24 pesos, en San Cristóbal de Las Casas está a 20 pero subirá a 22 pesos, en Tonalá está a 24 esos en algunos negocios, en Reforma, Pichucalco y palenque alcanza los 23 pesos, hay lugares donde se oferta a los 24 pesos, con estos precios las empresas alcanzan a sobrevivir.

Denunció el dirigente de la industria de la masa y la tortilla que existe una sobre oferta de tortillas en tiendas de abarrotes, dulcerías, papelerías y rosticerías devuelven lo que no se vende, a un promedio de 4 mil expendios le sobran tres kilos diarios y se reciclan todos los días 12 mil en Tuxtla Gutiérrez, mucha gente que se enferma es por consumo de tortillas con hongos por la humedad.