El avión que transporta a Nancy Pelosi, presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, despegó del aeropuerto Songshan de Taipéi, después de una visita en la que ha prometido que “Estados Unidos no abandonará a Taiwán” y que ha indignado a Pekín. Pelosi, que pasó menos de 24 horas en la isla, visitó esta mañana el Parlamento taiwanés y posteriormente se reunió con la presidenta de la isla, Tsai Ing-wen, quien le impuso una condecoración por su “apoyo” al territorio.
Pelosi, que es la primera presidenta de la Cámara que visita la isla en más de 25 años, desató la ira de Beijing con su viaje y dio pie a más de una semana de debates sobre si era una buena idea después de que se filtrara la noticia. En Taipéi se mostró tranquila pero desafiante.
“El mundo enfrenta hoy una elección entre la democracia y la autocracia“, señaló en un breve discurso durante una reunión con la presidenta de Taiwán, Tsai Ing-wen. “La determinación de Estados Unidos de preservar la democracia, aquí en Taiwán y en todo el mundo, sigue siendo férrea”.
El viaje de Pelosi ha avivado las tensiones entre Washington y Beijing más que cualquier otra visita de congresistas estadunidenses dado su cargo de presidenta de la Cámara, la primera que viaja a Taiwán en 25 años, desde que Newt Gingrich lo hiciera en 1997.
Tsai, quien dio las gracias a Pelosi por sus décadas de apoyo a Taiwán, le entregó una distinción civil, la Orden de las Nubes Propicias.
China ve legitimo responder a “graves provocaciones” China afirmó este miércoles que sus ejercicios militares que están previstos cerca de Taiwán son “necesarios y legítimos” tras la visita a la isla de Nancy Pelosi.
Estos ejercicios militares, que se acercan hasta 20 km de las costas taiwanesas, son “una medida necesaria y legítima para responder a las graves provocaciones de algunos políticos estadunidenses y de los independentistas taiwaneses”, dijo a la prensa Hua Chunying, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores.
Estos ejercicios militares, que se acercan hasta 20 km de las costas taiwanesas, son “una medida necesaria y legítima para responder a las graves provocaciones de algunos políticos estadunidenses y de los independentistas taiwaneses”, dijo a la prensa Hua Chunying, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores.