Estamos a pocos días de la conmemoración del inicio de la guerra de Independencia de México y, sin duda, uno de los personajes más famosos de estas fechas es Miguel Hidalgo.

La imagen del cura que presuntamente tocó una campana en Dolores Hidalgo, Guanajuato, para incitar al movimiento armado, es conocida por todos los mexicanos.

Sin embargo los historiadores coinciden en que no hay un retrato fidedigno del héroe, pues en esa época sólo las figuras con mucho dinero y poder tenían la posibilidad de pagar por un cuadro donde se plasmara su imagen.

El llamado ‘Padre de la Patria’ no tenía los recursos para acceder a dicho privilegio; asimismo, tuvo que huir para no ser arrestado por incitar a la rebeldía. Sus esfuerzos por evitar la captura no rindieron frutos, pues se le ejecutó en 1811 y luego de eso se prohibió hablar de él por más de una década.

Este es el contexto para indicar que nunca fue plasmado tal y como era; en realidad, las imágenes de su persona surgieron a raíz de narraciones sobre cómo era su aspecto.

De acuerdo con un texto escrito por Mónica Cruz para Verne, la descripción más confiable del personaje fue narrada por el político Lucas Alamán dado que él lo conoció personalmente.

De dónde surgió la imagen que conocemos del cura Miguel Hidalgo?

El primer retrato del ‘Padre de la Patria’ surgió en 1823, aunque no tenía nada qué ver con lo que conocemos ahora. El hombre calvo, cano y anciano que conocemos fue pintado por primera vez por Antonio Serrano en 1831. Pero hay otra versión:

Lo que se dejó claro es que cada pintor plasmó al héroe con la misma idea de los rasgos descritos por Lucas Alamán, pero con su particular estilo y técnica.

En 2007 el entonces gobernador de Coahuila, Humberto Moreira, planteó que el sacerdote había surgido con base en el aspecto de un hombre austriaco del que no se sabe el nombre.

Según el priista, Maximiliano de Habsburgo fue responsable de tratar de encontrar la identidad del cura Miguel Hidalgo. El europeo habría lanzado una campaña y hasta supuestamente pidió a un extranjero que posara para obtener la imagen. Esta versión nunca fue comprobada, por lo que lo más acertado y documentado es lo que ya se mencionó anteriormente.