El presidente ruso, Vladimir Putin, aseguró este miércoles que no tiene “ninguna duda” sobre la victoria de su país en la ofensiva de Ucrania, casi un año después de iniciarse y pese a los reveses militares sufridos por Moscú.

La victoria “está garantizada, no tengo ninguna duda”, declaró Putin en una visita a una fábrica de armamento en San Petersburgo.

Según él, lo que ayudará a Rusia es “la unidad del pueblo ruso, el coraje y el heroísmo de nuestros soldados (…) y evidentemente la labor de nuestro sector militar e industrial”.

El mandatario reiteró que, según él, Rusia se enfrenta a un “régimen neonazi” en Ucrania, y afirmó que seguirá “ayudando” a la población del este separatista de Ucrania.

“No podemos no proteger” a esa población, insistió. “La victoria será nuestra”, aseguró Vladimir Putin.

Pese a reveses, afirma que “todo se desarrolla según los planes”

El dirigente ruso hizo estos comentarios casi 11 meses después del inicio de la ofensiva en Ucrania, donde las fuerzas rusas sufrieron en los últimos meses una serie de reveses ante el contraataque ucraniano.

A raíz de esas dificultades en el terreno, Putin ordenó movilizar a 300 mil reservistas, y una campaña de bombardeos de las infraestructuras energéticas ucranianas.

La semana pasada, el ejército ruso y los mercenarios del grupo Wagner anunciaron la toma de la localidad de Soledar, en el este de Ucrania, situada cerca de la ciudad de Bajmut, que Moscú lleva meses intentando conquistar.

Tras el anuncio de la toma de Soledar, Putin aseguró que sus fuerzas tienen una “dinámica positiva” en el frente, y afirmó que “todo se desarrolla según los planes del ministerio de Defensa y del Estado Mayor”.