El Partido Acción Nacional (PAN) ha reaccionado finalmente a la condena de su antiguo zar antidrogas tras días de guardar silencio. El presidente del partido, Marko Cortés, dijo que Genaro García Luna “nunca fue panista” y que la intención del Gobierno de Andrés Manuel López Obrador de identificar al exfuncionario de las Administraciones panistas de Vicente Fox (2000-2006) y Felipe Calderón (2006-2012) era una estrategia “perversa”. Consultado sobre la respuesta que dio el partido de oposición, el presidente dijo que el PAN no podía desligarse de García Luna. “Si era militante o no, eso no es lo fundamental, lo fundamental es que fue hombre clave para enfrentar la delincuencia y se asoció a la delincuencia con Fox, que sí era militante del PAN, y fue secretario de Seguridad Pública de Calderón, que llegó al Gobierno impulsado por el PAN”, ha dicho.

La reacción del PAN tardó en llegar. Calderón respondió la noche del martes, horas después de que se conociera el veredicto contra su mano derecha en Estados Unidos, defendiendo su política de seguridad y tomando distancia de su exfuncionario. Pero el resto del partido había mantenido el silencio. El primero que se animó a alzar la voz fue Cortés, que desmintió que García Luna tuviera algo que ver con el partido. “Él con nosotros no tiene nada que ver”, dijo en un video publicado en las redes sociales. En las imágenes sale también Cecilia Patrón Laviada, secretaria general de la formación, que asegura que el exsecretario en prisión “nunca ha sido militante del PAN” y que “si cometió delito deberá pagar las consecuencias”.

El siguiente en reaccionar fue Santiago Creel, secretario de Gobernación con Vicente Fox, quien habló del tema en una conferencia de prensa en la Cámara de Diputados, que actualmente preside. “Estoy aquí porque vengo a dar la cara, creo en la justicia, creo en la ley, creo en la Constitución y creo en quien la hace, la paga”, ha dicho este jueves. “Se decía que era un superpolicía, lo que resultó fue ser un supertraidor, traidor a México, traidor a su institución y traidor a sí mismo”, ha agregado.

El presidente ha celebrado este viernes que los líderes del partido abiazul finalmente hablaran y reconoció que era “una situación difícil para ellos”. “Celebro que después de un tiempo, porque se quedaron como pasmados, ya empezaron a manifestarse”, ha dicho al ser consultado sobre la evasiva respuesta del PAN a la sentencia. “No se puede tapar él solo con un dedo, esto de que no es militante del PAN, debe de haber infinidad de testimonios de cómo legisladores y dirigentes del PAN defendían la estrategia de Calderón y García Luna”. López Obrador ha dicho que el partido “tendría que pedir la investigación a fondo”, empezando por preguntar a exzar antidrogas qué relación mantenía con los dos expresidentes panistas.

Entre lo declarado por los representantes del partido de oposición destacaron que García Luna debería haber sido juzgado en México. López Obrador coincidió con ellos, y dijo que en el país existe una gran desconfianza en el Poder Judicial. “Es una llamada de atención para la justicia mexicana, porque se debió juzgar aquí”, ha reclamado.