El periodista Ciro Gómez Leyva reclamó a las autoridades que a dos meses del atentado en su contra, ocurrido en la Ciudad de México, no hay información sobre quién dio la orden para matarlo.
“Ellos serían los encargados de la ejecución, pero ¿quién les dio la orden? No lo sabemos, a dos meses de distancia, no lo sabemos. Hay 12 detenidos, llevan más de un mes detenidos”, lanzó el periodista.
“Y el presidente (Andrés Manuel) López Obrador como que se lavó las manos, que es lo que hace este Gobierno: matan a un periodista y dicen, ‘pero ya hay detenidos’ (…) y luego no se sabe mucho más”, puntualizó.
Hasta el momento, están vinculadas a proceso un total de 12 personas tras el atentado a Gómez Leyva, sin embargo, a ninguna se le acusó de homicidio en grado de tentativa.
¿Por qué si se dio con esa velocidad la acción en un principio de la policía de la Ciudad de México, que en unos días tenía localizadas y detenidas a estas personas, qué pasó después?”, cuestionó el comunicador.
Incluso, Gómez Leyva apuntó que sus abogados han tenido dificultades para acceder a algunos documentos sobre la investigación.
“No sólo no soy informado, gente cercana, amigos abogados, se acercaron para ofrecerme su acompañamiento en este caso como asesores victimales. Y estoy trabajando con un despacho de abogados que amablemente están haciendo este trabajo”, refirió.
“No sólo no tienen información, que es un despacho grande, con mucha experiencia en el litigio y los casos penales, sino que batallan para obtener los documentos. Y batallan como batalla cualquiera (…) ‘Es que tenemos derecho a tal parte de la carpeta’, ‘Sí, pero se las vamos a dar hasta la próxima semana’”, indicó el periodista.
El atentado contra Ciro Gómez Leyva, uno de los periodistas radiofónicos más populares de México, ocurrió el 15 de diciembre en la Ciudad de México, cuando fue atacado por dos personas en motocicleta que dispararon en su contra con la intención de asesinarlo, a tan solo unos metros de su domicilio.
En 2022 México se consolidó como el “país en paz” más peligroso para la prensa, al concentrar el 20 % de los asesinatos de periodistas en el mundo, con 13 casos, según Reporteros Sin Fronteras.