El Gobierno británico ve “probable” que Rusia esté lanzando contra Ucrania misiles concebidos para ser utilizados como armas atómicas pero desprovistos de cabezas nucleares, lo que pondría en evidencia que está agotando su reserva de proyectiles de largo alcance.
En su parte diario sobre la guerra en Ucrania, el Ministerio británico de Defensa alertó del uso de estos misiles, los cuales “aunque todavía producirán daños debido a su energía cinética y al combustible restante, es improbable que consigan efectos fiables sobre los objetivos”.
El ministerio asegura en su comunicado que imágenes obtenidas en código abierto muestran los restos de un misil de cruces AS-15 KENT, diseñado en la década de 1980 exclusivamente para ser utilizado como arma nuclear y cuya cabeza habría sido sustituida por un lastre.
A juicio de Londres, Moscú está usando este tipo de armamento casi con toda seguridad como señuelo para distraer a las defensas aéreas ucranianas
“Cualquiera que sea la intención de Rusia -concluye el parte británico-, esta improvisación subraya el nivel de agotamiento de las reservas rusas de misiles de largo alcance“.