Al menos en unos 40 municipios del estado, en su mayoría indígenas, enfrentan problemas para el pago de la energía eléctrica, debido a que las altas temperaturas elevan el consumo y porque la Comisión Federal de Electricidad (CFE) ha sido muy injusta con los chiapanecos al estar incrementando constantemente los costos, denunció la representante del Movimiento Organizado de los Pueblos Originarios en Resistencia (MOPOR), Esperanza Pérez Arriaga.
Dijo que el director de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), Manuel Bartlett Díaz, no ha querido hacer justicia a Chiapas estableciendo un nuevo sistema tarifario que sea justo para los usuarios del servicio, no ha atendido de igual forma a todos los estados del país, mientras que a Tabasco le condonó en el 2021 la deuda superior a los 11 mil millones de pesos, en Chiapas, son los que menos consumen quienes pagan más.
En el estado a finales del 2018 el gobierno del estado pretendía canjear con la CFE un edificio público conocido como Cabeza Maya en el boulevard Belisario Domínguez, a la CFE por la deuda en ese momento cercano a los 2 mil millones de pesos, ello, debido a que era probable el traslado de las oficinas de la institución federal al estado, lo que no ha ocurrido, sin embargo, no se tiene información precisa de la deuda actual en razón de que hay pública, en la que se incluyen ayuntamientos y social, por parte de usuarios en resistencia al no pago.
En el 2020, durante el impacto más fuerte de la pandemia del SARS Vo2 (Covid 19) se documentó que la deuda de los municipios de Chiapas era de 719.7 millones de pesos, se estima que el monto ha ido en aumento, aunque no existe una cifra real, en el trienio anterior era superior a los 600 millones de pesos, por lo que a juicio del Movimiento Organizado de Pueblos Originarios en Resistencia, urge una solución.
La Zona de Distribución Tuxtla de la Comisión Federal de Electricidad y la División Sureste de la paraestatal, no han hecho público la deuda real de Chiapas tanto de instancias públicas como privada y social, para insistir en una negociación, y a la vez, en el establecimiento de una tarifa justa para Chiapas, debido a que aporta un importante volumen de energía hidroeléctrica a través de las presa Angostura, Chicoasén, Malpaso, Peñitas, Bombaná y José Cecilio del Valle.
De acuerdo con Pérez Arriaga, en municipios indígenas como Tzimol, una familia de escasos recursos económicos con dos focos en su hogar ha pagado un servicio eléctrico desde los 150 pesos hasta los 500 pesos y más, cuando el consumo es el mismo o puede ser menor, en otros municipios como Copainalá hay quienes han pagado desde los 250 pesos a los 650 pesos, cuando la medición es la misma, o en Huixtán hogares con el mismo consumo y mismo medidor han llegado a pagar desde los 200 pesos a los 700 pesos.
Planteó que el Estado Mexicano debe hacer justicia a Chiapas a través de todas las instituciones del sector, en acuerdos con el Congreso de la Unión y el gobierno del estado, en Chiapas lamentablemente se mantendrá la resistencia al no pago del servicio eléctrico, no porque no se quiera pagar el servicio, sino porque debido a los altos costos las familias priorizan necesidades.