Un niño de 10 años procedente de Honduras se encuentra en un limbo jurídico luego de que hace casi un mes fuera encontrado viajando solo en medio de un grupo de migrantes que se dirigía hacia Estados Unidos y que fue detenido por autoridades mexicanas en Veracruz, según informó este miércoles en un comunicado el Instituto Nacional de Migración mexicano (INM), que ahora busca a sus familiares para reunificarlo.
Según el comunicado, el menor viajaba hacia EE.UU. para reencontrarse con su madre, no tiene información sobre su padre y su tía, la persona que lo cuidaba, dijo que ya no puede responsabilizarse por él.
El niño fue encontrado el 18 de julio cuando viajaba como parte de un grupo de 229 migrantes de varias nacionalidades que fueron interceptados en dos autobuses en condiciones de hacinamiento, indicó el INM.
El menor dijo a los agentes migratorios de México que “su tía lo mandó a que cruzara la frontera con Estados Unidos para que buscara a su madre, ya que ella no se podía hacer responsable de él”, se explicó en el comunicado.
Agregó que “su madre emigró desde hace nueve años a Estados Unidos, donde ahora cuenta con permiso para trabajar”. Sobre su papá, dijo que “no sabe nada de él”. No se dieron más detalles.
Según el INM, personal de la institución se comunicó con la tía del niño, que vive en Honduras, quien les dijo que “ya no se puede hacer responsable de su cuidado, y por eso lo mandó a que intentara cruzar la frontera para buscar a su mamá u otro familiar”.
Las autoridades mexicanas no han identificado al menor, a la tía o a la madre, y han dicho que coordinan “esfuerzos para contactar a su madre u otro familiar y retornarlo a su núcleo familiar”.