Elon Musk, el nuevo dueño de Twitter, ha animado a sus 114,8 millones de seguidores en la red social a votar a los republicanos en las elecciones de medio mandato que se celebran este martes en Estados Unidos. El inefable Musk, que acapara titulares a golpe de tuit, ya se había manifestado anteriormente afín al partido de Donald Trump, pero su publicación de este lunes, en vísperas de unas reñidísimas elecciones para la renovación del Congreso, puede dar a los conservadores algún voto extra.
La publicación va dirigida “a los votantes independientes” y dice: “Compartir el poder frena los peores excesos de ambos partidos, por lo que recomiendo votar por un Congreso republicano, dado que la presidencia [del país] es demócrata”. En un hilo, que ha fijado en su perfil, Musk se responde: “Los demócratas o republicanos de línea dura nunca votan al rival, así que los votantes independientes son los únicos que realmente deciden quién está al cargo”. El pretendido ejercicio de equidistancia, en pro de un contrapeso de poderes, no logra ocultar sin embargo una orientación política que quedó de manifiesto en mayo, cuando anunció que, tras haber votado en anteriores elecciones a los demócratas, ahora apoyaría a los republicanos. A mediados de agosto, el empresario intentó matizar su apuesta asegurando que siempre estará al lado de “la mitad moderada de los demócratas y [la mitad moderada de] los republicanos”.
Aunque la oportunidad de la publicación, la víspera de las elecciones, haya chocado a más de uno, no es sino la constatación de sus preferencias. Mensajes en la red social llevaban preguntándose semanas, la mayor parte de las veces de manera retórica, si la compra de Twitter por el magnate implicaría una propaganda activa a favor de los republicanos. Cabe recordar que de todos los candidatos de este partido a las elecciones de medio mandato, al menos 300 defienden la infundada teoría del fraude electoral en 2020, una de las enseñas de Trump.
Pese a su apuesta por la moderación y el equilibrio entre facciones y poderes, las credenciales republicanas de Musk siempre han estado ahí. A principios del verano dijo que se inclinaba por apoyar al gobernador republicano de Florida, Ron DeSantis, que opta a la reelección en su Estado y es un claro aspirante a la presidencia del país en 2024, porque Trump era “demasiado viejo” para volver a ser presidente.